
Ático con vistas al mar y terrazas en el borde del casco antiguo de Palma de Mallorca
Palma de MallorcaÁtico con vistas al mar y terrazas en el borde del casco antiguo de Palma de Mallorca
Descripción:
Elegante ÁTICO con terrazas y vista al mar CERCA DE LA RAMBLA, en el norte del casco antiguo de Palma de Mallorca. La ubicación es muy tranquila, céntrica y práctica... ideal para vivir todo el año, igualmente ideal como segunda residencia. Forma parte de un CUIDADO EDIFICIO con vestíbulo destacado, ascensores, garaje subterráneo y vecinos acomodados. El piso dúplex fue REFORMADO TOTALMENTE en 2010 sin escatimar en gastos. Se trata de una vivienda de una elegancia atemporal en PERFECTO ESTADO. También destacan las atractivas terrazas con buena privacidad, entre otras la amplia terraza (55m²) delante del salón con vista a la Tramuntana, y arriba otra TERRAZA (50m²) CON VISTA A LA CATEDRAL Y AL MAR. Distribución de la vivienda (aprox. 212m²): abajo salón-comedor, cocina, 3 dormitorios dobles (el más grande con vestidor y terraza), 2 baños (1 en suite); arriba el despacho (según gustos, posiblemente la suite principal), 1 baño y el lavadero. Equipamiento: suelos de iroko, armarios empotrados, doble cristal, persianas eléctricas, CALEFACCIÓN a gas, a. a. frío/calor, descalcificador, osmosis, ducha exterior, ASCENSOR. Incluido en el precio: PARKING PARA 2 COCHES. Póngase en contacto con nosotros para más información (tenemos planos) o para una visita. No asumiremos ninguna responsabilidad por la información proporcionada. Referencia KPP07746
Mobiliario
Locación
El casco antiguo de Palma, también conocido como el "Casco Antiguo", es la pieza central de la capital de Mallorca y un fascinante laberinto de calles estrechas, plazas y edificios históricos. En medio de este antiguo telón de fondo se alza la imponente Catedral de Palma, "La Seu", con su llamativa arquitectura gótica que domina el horizonte. Además de la catedral, el casco antiguo también incluye impresionantes restos de antiguas murallas y puertas de la ciudad que una vez protegieron la ciudad, así como el majestuoso palacio real, "Palau de l'Almudaina". El ambiente de la ciudad es vibrante y animado, caracterizado por una rica diversidad cultural y un animado bullicio. Abundan los comercios, desde los tradicionales negocios de artesanía hasta las modernas boutiques, así como multitud de restaurantes, bares y cafés que llenan de vida las calles y plazas. El casco antiguo es también un centro cultural con numerosos museos, galerías y lugares históricos que ofrecen una visión de la rica historia y cultura de Mallorca.